La Biblioteca de la Universidad de Granada lanza un proyecto destinado a apoyar a las personas con dislexia
El 8 de octubre es el día internacional de la dislexia. EL 24 de octubre el día de las bibliotecas. Parece, pues, que octubre es el mes idóneo para publicar nuestro nuevo proyecto de apoyo a las personas con dislexia.
La dislexia es un trastorno neurobiológico que afecta a la lectoescritura y que se manifiesta por dificultades en la precisión y fluidez en el reconocimiento de palabras y por problemas de decodificación del lenguaje en individuos con una inteligencia media o alta. Según la Organización Mundial de la Salud, entre un 5 y un 15% de la población mundial tiene dislexia.
A pesar de que las primeras investigaciones se remontan al siglo XIX y de que no ha dejado de investigarse desde entonces, es tal el desconocimiento entre la población en general, que la mayoría de las personas con dislexia ni siquiera sabe que la tiene y pasa la vida pensando que es vaga, tonta e incapaz. Se estima que, del fracaso escolar en España, el 40% lo causan personas con dislexia que no han sido debidamente identificadas ni atendidas. Se trata, pues, de un colectivo vulnerable y en riesgo de exclusión social.
La Biblioteca de la Universidad de Granada, que se caracteriza por su compromiso y responsabilidad social, y cuya misión es facilitar el acceso a los recursos de información y al conocimiento de manera equitativa, se plantea una serie de acciones para facilitar la inclusión a las personas con dislexia, en línea con el eje estratégico 5 del Plan Estratégico de la Biblioteca y en línea con los Objetivos 4, 8 y 16 de los ODS. Entre estas acciones cabe destacar la impartición de un curso de dislexia dirigido al personal de bibliotecas y la puesta a disposición de las personas con dislexia de los recursos del Servicio de apoyo documental a personas con discapacidad visual de la Biblioteca.